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miércoles, 30 de diciembre de 2009

REMEMBER DEL AÑO 2009

Estamos terminando el año 2009 y como losa pesada de hormigón armado (concreto armado)que pende sobre nuestras cabezas, nos acogemos con esperanza a la llegada del nuevo año 2010, ya que el recuerdo del 2009 no es más que una fluctuación espacio-temporal acogida al paso del mismo tiempo pero con una marcada conjunción de sucesos negativos que han afectado a la sociedad en general y a 4 millones de personas aproximadamente en particular (entiéndase paro), que ha llevado a la retracción del consumo, hecho el cual ha seguido acumulando las personas en las listas del desempleo, listas que parece ser que no van a dejar de incrementarse durante el venidero año 2010, ya que los augurios no son nada halagüeños, con el paro, las futuras subidas del precio del dinero, las subidas de los impuestos, las subidas de los carburantes, el desplome de la venta de viviendas, el desplome de otras ventas con la consiguiente caída del empleo tanto en el comercio como en la industria, los apoyos y subvenciones a las ventas del automóvil la verdad que tienen los días contados, el endeudamiento de los estados, las comunidades y los ayuntamientos van a producir un panorama de des-inversión en obra pública que también va a llevar a otras empresas que en la actualidad se encuentran al límite por la morosidad del sector público, todos estos factores incluidos en el gran traca final como es la morosidad a los bancos, la morosidad del sector público y privado, la caída de la inversión y el paro, nos van a llevar a un panorama socio-económico-político muy calentito para el próximo año, todo ello se puede ver suavizado por el repunte en las economías europeas, repunte que nos puede dar un pequeño tirón en las exportaciones mejorando la balanza de pagos, ya que se van a ralentizar las compras al exterior.
Como ejemplo podemos ver que el consumo energético ha bajado un 4%, el mayor en los últimos 50 años y eso es debido sobre todo a la caída de la industria.
Así que lo más importante en estos momentos es para las economías privadas aumentar los ahorros para lo que pueda venir en el futuro y para las empresas es intentar conseguir financiación externa en este bosque monolítico y encerrado en si mismo que aunque no da dinero en condiciones, si que ha conseguido grandes sumas de dinero público.
Pero bien ante tal panorama espero que nos suban los sueldos o salarios o limosnas en la misma proporción no se algo así como el 20% o el 25%, para que podamos pagar todas las subidas que se nos avecinan y por lo menos con lo que nos sobre del salario, podamos comer algo (por cierto lo de salario viene de los tiempos de los romanos ya que estos pagaban a los mercenarios de las legiones con sal y lo que sacaban de las rapiñas y las conquistas, pero la excepción al símil es que en aquella época la sal valía su peso en oro).

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